Continuamos esta VI temporada de la Filmoteca de Sant Joan d’Alacant con un segundo ciclo dedicado esta vez al tema de la prostitución. Un ciclo abordado desde la óptica de cuatro cineastas, de diferentes generaciones y nacionalidad, interesados por un tema siempre tan controvertido como atemporal.
Desde La Filmoteca de Sant Joan queremos recalcar el trabajo de estos directores en una época, la nuestra, en la que todavía permanece de plena actualidad la problemática de la prostitución, ya sean por las recientes propuestas para su legalización o por la atención que desde el nuevo "reporterismo callejero", en nombre del periodismo de investigación, se le ha dado en las diversas televisiones y otros medios de comunicación, a partir del filón que suscita cualquier tema de carácter sexual en la sociedad. De cualquier modo, este interés ha dado voz a unas mujeres marginales y necesitadas; en la mayoría de los casos engañadas y forzadas a vender su cuerpo para beneficio de terceros. Con este ciclo, “La Prostitución en el Cine”, queremos dar voz al problema y unirnos a la denuncia del mismo.
Comenzaremos el lunes 2 de noviembre con el clásico italiano Las Noches de Cabiria (Le notti di Cabiria, 1957) del gran Federico Fellini, protagonizada por, tal vez, la prostituta más famosa de la historia del cine: Cabiria. Interpretada por la inconmensurable Giulietta Masina en un papel por el que, junto al de Gelsomina en La Strada (1954), ha quedado inmortalizada como uno de los rostros imperecederos de la cinematografía mundial por méritos propios. Las Noches de Cabiria no es solamente imprescindible dentro de un ciclo sobre prostitución, sino que es, además, una obra de visionado obligatorio para todos los amantes del séptimo arte en general.
El 9 de noviembre recorremos la película japonesa La calle de la vergüenza (Akasen chitai, 1956) de Kenji Mizoguchi. Contemporánea a Las Noches de Cabiria, nos sumerge en un barrio de Japón repleto de prostíbulos. Esta película aborda el tema desde el trasfondo de una posible legalización y de cómo afectaría a las trabajadoras de la calle. Como se ha mencionado antes, dichas propuestas y las polémicas que suscitan son imperecederas. El director, Kenji Mizoguchi, trató el tema en gran parte de su filmografía debido a su experiencia vital, cercana al mundo de la prostitución. Mizoguchi reflejó siempre una posición valiente y feminista, mostrando una gran sensibilidad en el trato y una completa admiración por la fortaleza y determinación de la mujer en una sociedad, la japonesa, aún hoy amparada por los prejuicios machistas y subordinadas al placer y confort del género masculino.
El 16 de Noviembre repasamos la norteamericana Cowboy de medianoche (Midnight Cowboy, 1969) de John Schlesinger abordaremos el tema desde otras perspectivas: la marginalidad, la drogadicción, la homosexualidad masculina y la ruptura del sueño americano. Una película emblemática, con Jon Voight interpretando a un gigoló vocacional y Dustin Hoffman a un estafador tuberculoso, ambos inmersos en la jungla de los suburbios de Nueva York. Este drama está repleto de búsquedas infructuosas, de fracasos y de sueños huidizos, teniendo siempre al alcance la prostitución como medio para conseguir dinero fácil.
Por último, el 23 de Noviembre se dedicará a Lilya Forever (2002) del director sueco Lukas Moodysson; quizá la película más cruda sobre el tema del ciclo. Lilya Forever muestra la que es, sin duda, la faceta más despreciable de todo este asunto: el de la trata de blancas y la prostitución de menores. Moodysson mostró con una estética realista, sucia, casi impersonal, cómo la joven Lilya tiene que buscarse la vida en su Estonia natal para poder sobrevivir y cuáles son los engaños a los que se enfrenta por parte de las mafias que se dedican a la explotación de "ganado" humano en la civilizada Suecia de nuestros días.
Desde La Filmoteca de Sant Joan queremos recalcar el trabajo de estos directores en una época, la nuestra, en la que todavía permanece de plena actualidad la problemática de la prostitución, ya sean por las recientes propuestas para su legalización o por la atención que desde el nuevo "reporterismo callejero", en nombre del periodismo de investigación, se le ha dado en las diversas televisiones y otros medios de comunicación, a partir del filón que suscita cualquier tema de carácter sexual en la sociedad. De cualquier modo, este interés ha dado voz a unas mujeres marginales y necesitadas; en la mayoría de los casos engañadas y forzadas a vender su cuerpo para beneficio de terceros. Con este ciclo, “La Prostitución en el Cine”, queremos dar voz al problema y unirnos a la denuncia del mismo.
Comenzaremos el lunes 2 de noviembre con el clásico italiano Las Noches de Cabiria (Le notti di Cabiria, 1957) del gran Federico Fellini, protagonizada por, tal vez, la prostituta más famosa de la historia del cine: Cabiria. Interpretada por la inconmensurable Giulietta Masina en un papel por el que, junto al de Gelsomina en La Strada (1954), ha quedado inmortalizada como uno de los rostros imperecederos de la cinematografía mundial por méritos propios. Las Noches de Cabiria no es solamente imprescindible dentro de un ciclo sobre prostitución, sino que es, además, una obra de visionado obligatorio para todos los amantes del séptimo arte en general.
El 9 de noviembre recorremos la película japonesa La calle de la vergüenza (Akasen chitai, 1956) de Kenji Mizoguchi. Contemporánea a Las Noches de Cabiria, nos sumerge en un barrio de Japón repleto de prostíbulos. Esta película aborda el tema desde el trasfondo de una posible legalización y de cómo afectaría a las trabajadoras de la calle. Como se ha mencionado antes, dichas propuestas y las polémicas que suscitan son imperecederas. El director, Kenji Mizoguchi, trató el tema en gran parte de su filmografía debido a su experiencia vital, cercana al mundo de la prostitución. Mizoguchi reflejó siempre una posición valiente y feminista, mostrando una gran sensibilidad en el trato y una completa admiración por la fortaleza y determinación de la mujer en una sociedad, la japonesa, aún hoy amparada por los prejuicios machistas y subordinadas al placer y confort del género masculino.
El 16 de Noviembre repasamos la norteamericana Cowboy de medianoche (Midnight Cowboy, 1969) de John Schlesinger abordaremos el tema desde otras perspectivas: la marginalidad, la drogadicción, la homosexualidad masculina y la ruptura del sueño americano. Una película emblemática, con Jon Voight interpretando a un gigoló vocacional y Dustin Hoffman a un estafador tuberculoso, ambos inmersos en la jungla de los suburbios de Nueva York. Este drama está repleto de búsquedas infructuosas, de fracasos y de sueños huidizos, teniendo siempre al alcance la prostitución como medio para conseguir dinero fácil.
Por último, el 23 de Noviembre se dedicará a Lilya Forever (2002) del director sueco Lukas Moodysson; quizá la película más cruda sobre el tema del ciclo. Lilya Forever muestra la que es, sin duda, la faceta más despreciable de todo este asunto: el de la trata de blancas y la prostitución de menores. Moodysson mostró con una estética realista, sucia, casi impersonal, cómo la joven Lilya tiene que buscarse la vida en su Estonia natal para poder sobrevivir y cuáles son los engaños a los que se enfrenta por parte de las mafias que se dedican a la explotación de "ganado" humano en la civilizada Suecia de nuestros días.
La Filmoteca.